jueves, 4 de marzo de 2010

A propósito del Pabellón Peruano en la Expo de Shangai (2010)


Parece una casa de Asia pero es el Pabellón Peruano.
El Perú no es recto ni blanco.



Mas alla del objeto arquitectónico en sí, del cual pienso que no será totalmente inadecuado, considero que la designación de los arquitectos Cooper y Graña para construir el pabellón peruano en la Expo de Shangai (2010)  es como cuando llaman a partidos de futbol playa (de este siglo) a Sotil, Cubillas, Chumpitaz, Percy Rojas, etc. que ya jugaban mundiales cuando yo ni nacía, o cuando llamaban a jugar las últimas eliminatorias al Puma Carranza, Carty, Maestri, Jayo, etc., mostrando la pulsión por lo antiguo y el desinterés y la falta de apoyo a los nuevos valores futboleros.
Lo único bueno que hizo Chemo en la última selección fue presentar en varios campos de futbol a Zambrano, el Charapa Rengifo, Chavez y un par mas de jugadores jóvenes que la prensa internacional pudo notar rapidamente sus grandes dotes.

Es también como la crítica que hizo Maradona hace unos dias, previo a su juego contra Alemania, cuando le dijo a los periodistas que paren de pasar su gol con la mano el '86, el gol de Kempes el '78, las jugadas de Bochini, etc. y hablen de los goles que hacen hoy Messi, Tevez, Mascherano, etc.

Volviendo a la arquitectura, ignoro la forma de nombramiento de estos dos eximios arquitectos que estoy casi seguro nos representarán apropiadamente, pero presiento que esta acción también puede demostrar el gusto de los organizadores por perpetuar una forma profesional y las ganas de sentirse inocentemente seguros a base de conocidas firmas de arquitectos aparecidos desde la mitad del siglo pasado.

También, como en el fútbol, se muestra el temor por apoyar a los nuevos valores.

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